domingo, 29 de abril de 2018

El cruzado del tarifazo

29 de abril de 2018.

Por: Alfredo Zaiat.

Los subsidios no eran tan elevados en comparación internacional. No había derroche en el consumo. Ganancias extraordinarias de las empresas energéticas.



El presidente Mauricio Macri encabeza la campaña para buscar legitimidad política y social a una estructura tarifaria desproporcionada, injusta y regresiva. Datos duros desmienten sus principales argumentos para justificar el tarifazo.

El argumento más rústico, para justificar el aumento desproporcionado, injusto y regresivo de las tarifas de gas y luz, dice que existe una pauta de consumo de derroche en los hogares. El presidente Mauricio Macri encabeza esa cruzada repitiéndolo una y otra vez cuando no existe evidencia empírica ni respaldo en investigaciones en el área energética para sostener semejante afirmación. Que Macri y su familia vivan con el aire acondicionado prendido todo el año, como informó en su momento su esposa, o que algunos hogares privilegiados calefaccionen sus piletas en invierno no deberían orientar a sentenciar que toda la sociedad dilapida energía como esos representantes de la clase alta. En la defensa enfática de garantizar ganancias extraordinarias a conglomerados energético vía tarifazos, el gobierno carga la responsabilidad de los aumentos en sectores vulnerables, desde clases medias y bajas hasta pequeños y medianos comercios e industrias. El tarifazo sería culpa de ellos por años de despilfarro de los recursos energéticos. Macri lo afirma con la misma firmeza como cuando asegura que la inflación está bajando, sin recibir de sus interlocutores ocasionales la interpelación que no es cierto lo que dice.

Subsidios

Macri también critica la política de subsidios energéticos para buscar legitimidad social a los tarifazos, sin mencionar que ahora toda la sociedad está subsidiando a las petroleras pagando un precio del gas muy por encima del costo de producción. Hace años que la ortodoxia y la heterodoxia conservadora han demonizado a los subsidios a las tarifas de servicios públicos, logrando que gran parte de la sociedad aceptara que era necesario eliminarlos para vivir mejor. Ahora lo están padeciendo en los bolsillos.

La distorsión acerca de la comprensión acerca del alcance de la política de subsidios ha sido inmensa. Gracias a la cuenta de Twitter @elbosnio se descubre la existencia de un documento del FMI que se ocupa de ese tema. El objetivo de ese trabajo fondomonetarista es la de promover la disminución de los subsidios energéticos, pero resulta revelador porque informa que el nivel de subsidios que había hasta el 2015 en Argentina, en comparación internacional, era muy bajo.

En “How Large Are Global Energy Subsidies?”, el Fondo postula la necesidad de disminuirlos, exponiendo argumentos ambientales, fiscales y sociales. Por la cuestión ambiental, advierte que los subsidios, al abaratar el consumo de energías no renovables, incrementan la contaminación y gases de efecto invernadero.  Por el frente fiscal, indica que su financiamiento implica aumento de la deuda pública y más impuestos, además de desplazamiento de gasto público de otras áreas, como salud, educación e infraestructura, que afecta el crecimiento económico. Por el impacto macroeconómico y social, sentencia que “son una forma altamente ineficiente de brindar apoyo a los hogares de bajos ingresos, ya que la mayoría de los beneficios de los subsidios a la energía son, generalmente, capturados por hogares ricos”.

El informe del FMI calcula que los subsidios energéticos sumaban 5,3 billones de dólares en 2015, 6,5 por ciento del PIB mundial, aumentando de la estimación de 4,2 billones de dólares de 2011. El aspecto más interesante de ese documento es el cálculo particular de los subsidios energéticos en los países, mostrando que no eran significativos en Argentina en la comparación. Aquí va el detalle del monto de los subsidios energéticos en algunos países, en 2015, según el FMI:

  •     Estados Unidos, 2177 dólares per cápita.
  •     China, 1652.
  •     Canadá, 1283.
  •     Australia, 1259.
  •     Japón, 1240.
  •     Israel, 1113.
  •     Bélgica 909.
  •     Alemania, 684.
  •     Inglaterra, 635.
  •     España, 521.
  •     Chile, 515.

El promedio mundial de subsidios a la energía eléctrica era de 640 dólares por habitante en 2015. Argentina subsidiaba a cada habitante con 413 dólares, hasta 2015, el 35 por ciento menos que el promedio mundial.

Consumo

Quienes estudian con seriedad el tema energético explican que malgastar es muy diferente que el uso eficiente. En el mercado argentino no existe derroche pero sí una utilización deficiente de la energía, por ejemplo por el tipo de construcción de las viviendas y por la calidad de los electrodomésticos. Aunque para muchos es difícil de absorber porque ha habido años de desinformación, y más aún ahora con un Presidente de la Nación que insiste hasta el hartazgo con el tema del dispendio, el consumo energético de los hogares no se define por el nivel de las tarifas. El consumo no es mayor o menor según el precio del gas o de la luz, sino que está definido por la cuestión climática y por la calidad de la infraestructura de la vivienda.

Por el tarifazo no habrá ahorro; y sí, transferencias inmensas de ingresos a las compañías energéticas.

La demanda de gas natural está definida por la temperatura, por eso es mayor en las provincias más frías, y es inelástica respecto de los cambios tarifarios y el nivel de ingreso. Esto último significa que la utilización de gas no sube o disminuye según el nivel de la tarifa y el monto de los ingresos de los hogares. Son conclusiones de la investigación “El consumo de gas natural por red. Análisis territorial y temporal”, de Pedro Chévez, Carlos Discoli e Irene Martini, publicada en “Realidad Económica” N°308.

A partir del análisis realizado de la demanda nacional de gas natural residencia en un período extenso, que abarca de 1993 a 2014, la troika de investigadores

  •     explican que el consumo de gas natural demuestra una clara incidencia del factor climático y en consecuencia una relación directa con la ubicación geográfica;
  •     destacan que la demanda con un mismo nivel de temperatura no resulta constante a lo largo del territorio, sino que se acrecienta a medida que la rigurosidad del clima es mayor;
  •     mencionan que existen diferentes variables tecnológicas y de comportamiento, que conjugadas con situaciones climáticas extremas justifican mayores consumos y que no necesariamente significan sobreconsumos adjudicables a un mal uso del recurso energético;
  •     indican que entre las dimensiones y variables consideradas hay que tener en cuenta la mayor permanencia en los hogares debido a las condiciones climáticas, ocasionando una mayor demanda de energía, como así también menores niveles de radiación solar y heliofanía (número de horas reales de insolación diaria), minimizando el efecto de la ganancia energética directa en las viviendas; y
  •     afirman que a nivel nacional el consumo promedio de gas natural por usuario acompañó en cierta manera la coyuntura del país sin cambios muy pronunciados, concluyendo que la demanda de gas es inelástica.

O sea, con más o menos poder adquisitivo, el consumo se mantiene constante. Si sube la capacidad de compra por mejoras en términos reales de los salarios o jubilaciones, los hogares incrementan el consumo de otros bienes motorizando la demanda y la expansión del mercado interno. En cambio, si disminuye el salario o el haber jubilatorio real, no se reduce el consumo de gas, sino el de otros bienes porque de esa forma generan el ingreso necesario para pagar un servicio público esencial. El tarifazo afecta en forma negativa de ese modo el nivel de actividad del mercado interno.

Balances

Hasta las empresas energéticas, beneficiarias del shock del tarifazo, se alejan de la campaña oficial de confusión y muestran que la cuestión climática es una variable relevante del nivel de consumo de los hogares. El balance anual 2017 de Edenor informa que hubo “un consumo inferior en aproximadamente 3 por ciento respecto al año anterior”, atribuyendo esa disminución “a un invierno poco severo, con temperaturas medias que superaron en 2°C las del año 2016”. El “ahorro” en los hogares no fue por el tarifazo; fue por razones climáticas.

El efecto monetario directo de los aumentos desproporcionados de tarifas estuvo reflejado en los balances de las empresas energéticos. Hubo menos ingresos disponibles en los hogares para otros consumos y estrangulamiento en la estructura de costos de comercios e industrias (ver nota aparte) con la contrapartida del incremento de las ganancias de las empresas energéticas

El recorrido por los ejercicios anuales presentados en la Bolsa de Comercio, eligiendo firmas representativas de diferentes eslabones de la cadena energética, permite observar utilidades generalizadas originadas por el tarifazo.

  •     Distribución eléctrica.

Edenor: La reseña del ejercicio 2017 indica que tuvo “mejoras significativas” del cuadro de resultados respecto al año anterior. Los ingresos pasaron de 13.080 a 24.340 millones de pesos; los resultados operativos, de una pérdida de 656 a una ganancia de 2495 millones de pesos; y el resultado neto, de un quebranto de 1189 a una utilidad de 682 millones de pesos. Señala que esos saldos “nos han permitido recomponer el patrimonio, aunque seguimos registrando resultados acumulados negativos”. Informa que en 2017 invirtieron 4137 millones de pesos, un 53 por ciento más que lo ejecutado en 2016, que “a su vez habían resultado en el máximo hecho por la sociedad en toda su historia”.

Edesur: Por razones no explicitadas, el comportamiento de sus resultados es opuesto al de Edenor. El operativo fue positivo en 1546 millones de pesos, menor en comparación con los 2024 millones del ejercicio anterior. El integral total fue una pérdida neta de 1044 millones, superior a la de 275 millones de 2016. Informa que las inversiones alcanzaron los 3559 millones de pesos en obras destinadas “a mejorar la calidad del servicio”. Tiene un capital de trabajo negativo de 10.018 millones de pesos, principalmente como consecuencia de la deuda contraída con Cammesa para financiar la operación de la compañía durante los años pasados. En 2017, los fondos aplicados a inversiones totalizaron 3994 millones de pesos comparados con los 3088 millones de 2016.

  •     Transportadoras de gas.

TGN: Tiene 6806 kilómetros de gasoductos, y a través de sus dos troncales (Norte y Centro Oeste) abastece a ocho de nueve distribuidoras de gas y a numerosas generadoras eléctricas e industrias ubicadas en 15 provincias. Registró en 2017 ganancias de 842 millones de pesos en comparación con la pérdida de 259 millones de pesos en 2016, de 518 millones en 2015 y 257 millones en 2014. La variación de las ventas de 2040 millones de pesos entre los ejercicios 2017 y 2016 se explica por una mayor facturación de 1917 millones asociada “al incremento en las tarifas de transporte”, y el resto por servicios de “operación y mantenimiento de gasoductos”.

TGS. Por sus gasoductos, de 9183 kilómetros de extensión en total, transporta el 60 por ciento del gas consumido del país, atendiendo a 5,8 millones de usuarios finales. La ganancia en 2017 fue de 2793 millones de pesos, 200 por ciento más respecto de los resultados netos positivos del año anterior (930,6 millones). En el balance anual indica que el 44 por ciento de la tarifa del servicio público de gas se explica por el precio del gas en boca de pozo, y el restante 56 por ciento se divide en partes iguales entre los impuestos y los segmentos del transporte y la distribución.

  •     Generadoras.

Central Puerto. Esta empresa representa el 12,1 por ciento de la generación energética total, y el 17,5 por ciento de la generación térmica. En 2017, la ganancia operativa fue de 3111 millones de pesos, mientras que en el mismo período de 2016 fue de 2100 millones. La ganancia neta, en este caso, a diferencia de la mayoría de los balances, fue superior a la operativa por utilidades obtenidas en los resultados financieros: el saldo positivo en ese renglón del balance fue de 3508 millones de pesos.

  •     Distribuidora de gas.

Metrogas: Es la empresa de distribución de gas natural por red más grande del país, con el 18 por ciento del mercado con 2,4 millones de clientes. El resultado neto del año pasado fue una ganancia de 775 millones de pesos, cuando en 2016 había contabilizado una pérdida de 604 millones de pesos.

  •     Transporte de electricidad.

Transener. Junto a su controlada Transba anotó una ganancia neta del ejercicio 2017 de 2282 millones de pesos, cuando el año anterior había tenido una pérdida de 57 millones. Posee, opera y mantiene la red de transporte de energía eléctrica de alta tensión (550kV). Transba presta el servicio público de transporte de energía eléctrica de la provincia de Buenos Aires (66kV a 220Kv) por líneas de distribución troncal.

Costos


Como lo hizo con la reforma previsional asaltando el ingreso de los jubilados, Macri está lesionando también el de otro sector de su base electoral. Con el tarifazo castiga el presupuesto de los hogares de clases medias urbanas, y lo hace con dedicación para garantizar ganancias extraordinarias a las empresas energéticas.

El tarifazo es desproporcionado en relación al nivel de ingresos de la mayoría de la población. Esto lo dejó en evidencia el propio gobierno con la propuesta de disminuir o eliminar impuestos o tasas de las facturas de servicios públicos. Con esa medida aspira a aliviar el monto final de la factura de luz, gas y agua.

Ese descuento poco y nada cambiará el presupuesto de los hogares, y sólo muestra la desesperación del oficialismo ante la resistencia social y política que provoca el tarifazo. En esa búsqueda de compartir los costos de una medida anti popular abrazó a los gobernadores, que están actuando como aliados políticos, varios de ellos integrantes de una oposición, hasta ahora, colaboracionista con el ajuste.

Los tarifazos de la Alianza Cambiemos están derivando en una situación política muy incómoda para el oficialismo, expresada en las dos cámaras del Congreso. Pero también en una muy crítica por su impacto socioeconómico. La cruzada del tarifazo está ahogando el presupuesto de los hogares de las clases media y baja, que tiene como saldo un aumento de colgados a la red eléctrica: Edenor registra que el 17,1 por ciento del total de la energía entregada al mercado no la puede cobrar, que le significa unos 4000 millones de pesos menos de recaudación, mientras que en Edesur representan el 12,0 por ciento de la energía provista, contabilizando además un incremento de la morosidad en 6 puntos en los dos primeros años del gobierno de Macri respecto a la existente en 2015.

https://www.pagina12.com.ar/111494-el-cruzado-del-tarifazo

lunes, 16 de abril de 2018

El pez por la boca

16/04/18.

Por: Leo Ricciardino.

El hombre que dijo que bajar la inflación era “muy fácil” y que la inflación era la demostración palmaria de que “sos un mal gobernante”, y hasta que si la inflación no baja “es mi culpa y la de nadie más”; se encuentra hoy acorralado por sus palabras y por la inflación misma.



Mauricio Macri no pudo cumplir con la promesa más central de su campaña electoral: controlar los precios. Por segundo año consecutivo la cifra inflacionaria quedará muy lejos de las previsiones del gobierno. Recordemos: En el presupuesto 2018 se contemplaba una suba anual del 10%. Aquella famosa conferencia de prensa del equipo económico –única y última vez que se los vio juntos- corrigió el porcentaje al 15%. Hoy las estimaciones superan el 20% para cuando el año termine.

El propio presidente se muestra resignado y cuando se lo consulta sobre la inflación dice que trabajará intensamente para que quede “lo más cerca posible del 15%”. Por supuesto, es imposible.

Ahora, ¿qué es lo que ha hecho este gobierno para intentar bajar la inflación? Poco y nada, sobre todo teniendo en cuenta que eliminó los subsidios a los servicios básicos y hoy las tarifas son imposibles de absorber para una familia tipo, Liberó el precio de los combustibles que se trasladan directamente a precios. Sólo intenta bajar los salarios a los que considera como “costo caro” para cualquier empresa. Es como jugar con un bidón de nafta y unos fósforos y después sorprenderse porque algo se incendió.

El tema central con la inflación argentina es que, contrariamente a lo que dio Macri, es un fenómeno complejo. No hay una receta ortodoxa e implica más controles del Estado y algo mucho más difícil y en el camino contrario de la idea de este gobierno: Ampliar la matriz productiva del país. Ni siquiera está en la agenda del ministro Francisco Cabrera que ante la consulta de un fabricante rosarino de línea blanca sobre las dificultades para ampliar su producción, la respuesta del funcionario de Cambiemos fue: “Importá”.

En el gobierno anterior también había inflación, casi la misma que ahora. Pero los salarios alcanzaban la suba de precios. Pasa lo mismo que con la pobreza estructural. Antes también había pobres el tema es que vivían en un país donde tenían más acompañamiento del Estado.

https://www.rosarioplus.com/opinion/El-pez-por-la-boca-20180415-0010.html

domingo, 8 de abril de 2018

Cerrado por reformas

8 de abril de 2018.

Por: Héctor Recalde.

El gobierno para ricos sigue ajustando y la que sufre es la justicia social.



Detallo a continuación el “ahorro” que hace el gobierno a expensas de los programas sociales.

Conectar Igualdad

Bajo la gestión de Esteban Bullrich en el Ministerio de Educación, durante 2016 sólo se repartieron 200.000 computadoras y no llegó a cubrirse la totalidad del alumnado. Estas computadoras eran un remanente de 2015.

El programa Conectar Igualdad, renombrado como Plan Nacional de Educación Digital, viene siendo desmantelado año a año por la gestión macrista.

En 2016 el gobierno desactivó el Plan Nacional de Inclusión Digital Educativa (Pnide), que es el área pedagógica del programa de distribución de computadoras a los alumnos de escuelas públicas.

En 2017 recortó parte del presupuesto asignado a este programa y en 2018 volvió a podarlo, reduciendo en un 43 % sus fondos.

FinEs

Si bien este programa, a través del cual se puede finalizar los estudios secundarios, continúa vigente, el Ministerio de Educación y Deportes decidió trasladarlo a la órbita de las provincias. Debido al escaso presupuesto con el que cuentan, las provincias tuvieron que ajustar el programa y abrir menos comisiones. Más grave aún: a través de una resolución publicada en abril de 2017, la gestión de Esteban Bullrich dio de baja el FinEs en las Universidades, donde ya no se podrán inscribir nuevos alumnos.

En el 2018 se cerraron un total de trece sedes, lo cual perjudicó directamente a 500 alumnos y dejó sin continuidad laboral a 80 docentes.

Entre ellos cerraron los centros que funcionaban en las villa 20, de Lugano y La Carbonilla, de Paternal.

Coros y Orquestas para el Bicentenario

Coros y orquestas del Bicentenario, dependientes del Ministerio de Educación, fueron transferidos a los municipios pero sin transferencia de fondos.

Danza por la Inclusión

El Ministerio de Cultura de la Nación informó el cierre del programa en enero de 2018.

La compañía había comenzado en el área de Desarrollo Social y se mantuvo en esta cartera hasta el 2017, cuando pasó a la órbita de Cultura.

Argentina Sonríe

El gobierno de Mauricio Macri derogó el decreto por el cual fue creado el programa Argentina Sonríe.

Hasta diciembre de 2015, ese programa tenía 2.316 personas en tratamiento y 3.300 prótesis instaladas. Además había 626 talleres de prevención de salud bucodental con 11.638 participantes. Se hacían limpiezas de dientes, arreglos de caries, tratamientos de conducto, extracciones dentales y colocaciones de prótesis. Según la resolución publicada en el Boletín Oficial el 21 de octubre, que lleva la firma del ministro Jorge Lemus, la decisión fue tomada por cuestiones técnicas.

Programa de Salud Sexual y Reproductiva

La gestión del ministro de Salud, Jorge Lemus, cesanteó a 55 profesionales que pertenecían a este programa. Sólo 19 conservaron el puesto, pero reubicados en otros sectores. Así se redujo la capacidad de acción y abordaje territorial de este área que, en 2015, distribuyó en centros de salud de todo el país 33.212.649 métodos anticonceptivos.

Quedaron muy afectadas las Áreas de Monitoreo y Evaluación, Fertilidad, Diversidad, Comunicación y Promoción Comunitaria.

Plan Qunita

Mediante la resolución 454, publicada en abril de 2016 en el Boletín Oficial, el Ministerio de Salud dio de baja el plan Qunita con el pretexto de que los elementos que acompañaban las cunas eran “muy riesgosos”.

Tras la entrega de 67.000 kits, el juez Claudio Bonadío rechazó acondicionar los objetos y, pese al repudio de neonatólogos y pediatras, ordenó la destrucción de 60.000 kits. UNICEF cuestionó la decisión y pidió que se revean los aspectos técnicos. Bonadío cambió de opinión y dijo que reutilizar los materiales del Plan Qunita sería decisión del Ministerio de Salud.

El Plan Remediar


Este plan, dependiente del Ministerio de Salud y vigente desde 2001, fue reemplazado por la Cobertura Universal de Salud (CUS). Los botiquines del Remediar contenían 74 medicamentos esenciales en su vademécum y garantizaban el acceso a ellos a 16 millones de argentinos en cualquier punto del país. Según un informe realizado por la Fundación Soberanía Sanitaria, que conduce el ex ministro de Salud, Nicolás Kreplak, el gobierno bajó el número de remedios en stock a 7 porque busca que las provincias se hagan cargo de la compra de los mismos.

El PAMI

Fue uno de los organismos puestos en la mira de Cambiemos desde el inicio de la gestión. Los jubilados sufrieron en enero de 2016 restricciones en la cobertura de medicamentos que tenían al 100%.  En 2017 se resolvió dejar afuera del beneficio a quienes cobraran más de 8.500 pesos o tuvieran un auto con menos de diez años de antigüedad, más de una propiedad o yates o aviones. El cambio afectó a 200.000 afiliados. Luego, con la llegada de Sergio Casinotti desde IOMA al PAMI, arrancó la segunda parte del ajuste. Para reducir costos, se resolvió cambiar el sistema de facturación en la obra social de los jubilados y volver al llamado sistema de cápitas, en el que se paga una suma determinada por un número fijo de afiliados. La idea oficial es ajustar $1.600 millones. El resultado: resentir las prestaciones y la atención de los abuelos. Sumemos a estas decisiones la Reforma Previsional que disminuyó la fórmula de actualización del haber jubilatorio.

Asistir

El gobierno de Macri recortó fuertemente el programa Asistir, que depende del Ministerio de Trabajo, a través del cual se brinda información y asesoramiento sobre derechos laborales.

Hasta diciembre de 2016 contaba con 20 abogados, dos psicólogos y tres administrativos.

Hoy Asistir funciona con 10 abogados y sin asistencia psicológica.

Programa de Recuperación Productiva (REPRO)

Este programa significaba una ayuda para proteger los puestos de trabajo al subsidiar parte de los salarios. En 2016, en plena ola de despidos, el Ministerio de Trabajo que conduce Jorge Triaca redujo la inversión en esa herramienta contra el desempleo en un 30% respecto de 2015. Esto es: sólo 123.056 recibieron el beneficio en 2016, contra los 756.487 que lo habían cobrado un año antes, lo que significó una reducción de 814 millones de pesos.

Jóvenes por Más y Mejor Trabajo

Hasta diciembre de 2016 el programa contaba con 21 trabajadores y ahora solo quedaron 7 debido a despidos y reubicaciones.

Centros de Atención Judicial (CAJ)

Hasta diciembre de 2016 existían 82 CAJ, pero Cambiemos cerró al menos 30, en su mayoría en el conurbano bonaerense, dejando no sólo a la gente sin este servicio sino también a 200 trabajadores en la calle.

Consejo Nacional de las Mujeres.

Por medio de la Decisión Administrativa 12/2017, Peña resolvió recortar 67 millones de pesos asignados al Consejo Nacional de las Mujeres (CNM) y a la implementación del Plan Nacional de Acción para la Prevención, Asistencia y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres (PNA).

De esta manera el gobierno de Macri dejó sin efecto el presupuesto para el área debatido y aprobado en el Congreso Nacional, en noviembre pasado.

Argentina Innovadora 2020

Luego del recorte de 3.000 millones de pesos en el presupuesto del Ministerio de Ciencia y Tecnología para 2017, las consecuencias se empezaron a observar en los programas de la cartera que conduce Lino Barañao. Desde el CONICET denunciaron que para 2018 ingresarán un 60% menos de investigadores al organismo, lo que representa la cifra más baja desde 2004.

Esto choca con el Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva “Argentina Innovadora 2020”, que se lanzó hace tres años y que fijaba el objetivo de alcanzar 5 investigadores por cada mil habitantes de la población económicamente activa.

https://www.elcohetealaluna.com/cerrado-por-reformas/